Todos los días vemos cómo se quedan en la cuneta multitud de pequeñas y medianas empresas, muchas empujadas por la actual situación de crisis económica en la que nos encontramos, otras porque no han sabido cómo cuidar su imagen de marca, e incluso hay quienes han padecido ambos efectos a la vez. Todas aquellas que no han conseguido adaptarse a estos nuevos tiempos, han fracasado o se encuentran a un paso de hacerlo por culpa de no haberse preocupado en invertir recursos en reforzar su reputación y presencia en la red, tanto a través de su página corporativa como a través de las redes sociales.
Hoy en día, no es suficiente con registrar la marca, crear una simple página web de “quienes somos, qué hacemos y donde estamos” y esperar a que los clientes lleguen. La bajada del consumo y la fuerte competencia nos obligan como empresarios a actuar. Debemos potenciar nuestra “marca online”, es decir, debemos hacer destacar nuestra empresa en Internet ya sea a través de un rediseño de nuestra página web, interactuando con posibles clientes en las redes sociales, etc… Nunca es demasiado tarde para actuar, así que no esperes más a que lleguen los clientes y ve a por ellos.
Con las posibilidades de internet, la empresa se ha transformado.
Hace unos años, la comunidad de PYMES que encontrábamos en la red era mucho más reducida, silenciosa y selecta, no hacía falta emplear tantos recursos para potenciar la imagen de la empresa, ya que por aquellos tiempos, Internet se concebía como una simple y llana tarjeta de presentación, donde el visitante que llegaba a la página web podía conocer un poco más sobre la empresa, su actividad y ponerse en contacto con ella si lo precisaba.
Con el paso de los años y la aparición de las redes sociales, la tarjeta de visita ha pasado necesariamente a ser un escaparate de venta directa, donde la mayor prioridad y preocupación del empresario pasa por conseguir y convertir a los nuevos usuarios de la red en posibles clientes interesados por sus servicios.
¿Por qué ya no vale con “aparecer” en la red?
Como usuarios de internet, la forma en la que utilizamos la red ha cambiado gracias a la multitud de opciones y soluciones que se incluyen en las páginas corporativas, tienda online, formularios de contacto, redes sociales, etc….
Gracias a estas nuevas tecnologías, ahora es posible adquirir cualquier producto o servicio en unos segundos o minutos sin necesidad de ir a la tienda física, podemos ponernos en contacto con la empresa a través del formulario de contacto o de las redes sociales y realizarles las consultas que deseemos.
Ahora esta todo mucho más a mano y nuestra empresa no debe ni puede quedarse atrás.
Ahora hace falta actualizar nuestra web y ofrecer un servicio de calidad.
Las modas no sólo son aplicables a la ropa, a la peluquería, y a los complementos sino que todo (o casi todo) lo que nos rodea está condicionado por la moda del momento. Incluso las páginas webs que es el tema que estamos tratando. Así por ejemplo (pero sin citar a nadie), una empresa que haya diseñado su web en 2008, puede que en aquellos años la página web haya quedado muy bien pero si la comparamos con una actual, nos daremos cuenta de que se ha quedado desfasada y que ya no resulta atractiva o por lo menos, que necesita algunas mejoras. Incluso observaremos que no tiene redes sociales, que no aparece en las primeras páginas de Google (“¿Os habéis dado cuenta de que no he dicho primeras posiciones?”), y por tanto, que no tiene ninguna actividad desde hace mucho tiempo. Quien conozca un caso así, que levante la mano…
Hoy en día, lo que verdaderamente llama la atención al visitante es la creatividad y la originalidad con la que se presentan los contenidos, por lo que invertir en un gran diseño y montaje de la página web del negocio, contribuirá seguro a lograr una mayor exclusividad sobre la competencia, pero no os asustéis, ni es obligatorio invertir gran cantidad de dinero ni ser tan originales, debéis tener presente que una página web no es para siempre y que hay que actualizarla y adaptar las estrategias de marketing a los tiempos actuales.
Las empresas deben trabajar su imagen para intentar gustar al cliente y motivarlo a interesarse por sus productos o servicios. Basta con mirar a nuestro alrededor y comprobar como toda aquella empresa que ha rehusado de realizar estas mejoras, ha quedado relegada a un segundo plano, dejando que le superen otras con menor presupuesto y plantilla, pero con una buena página web y gran presencia en la red.
La interacción entre empresa y usuario ha dado un paso adelante con las redes sociales.
Las formas habituales de llegar al cliente con las que las PYMES han trabajado hasta hace unos años se basaban principalmente en realizar campañas publicitarias a través de los medios de comunicación tradicionales y el ya conocido “boca a boca”. Ahora la empresa tiene que conocer la opinión del cliente, saber sus gustos y ofrecerle productos ideales que cubran sus expectativas.
Para conseguir alcanzar este objetivo, las redes sociales son el recurso perfecto y más empleado en la actualidad, han supuesto una revolución total en las relaciones entre usuario y empresa. Gracias a ellas, se puede convertir a los visitantes en seguidores, y posteriormente en clientes.
En esta nueva forma de interactuar, las PYMES, al igual que las grandes compañías, deben “hacerse ver” para reforzar su presencia mediante técnicas que les permitan mejorar su reputación en los medios, todo ello a través de actividades y campañas promocionales que despierten la atención y mediante inversiones en publicidad con el propósito de aparecer en todos los espacios promocionales posibles.
Contar con un blog, una opción muy recomendada.
Las opciones que tiene una empresa para lograr atraer nuevos clientes también pasan por la creación de un blog corporativo que complemente a su página web. Si antes bastaba con estar presentes a través de una sencilla página web, ahora, además de existir en la red, surge la necesidad de ser vistos y escuchados. Una de las mejores opciones con las que se cuenta hoy en día es el blog.
Constituyen una de las mejores herramientas para lograr esta meta, ya que permiten generar y ofrecer al usuario contenidos relacionados con el sector al que la empresa se dedica, ofreciéndole siempre la posibilidad de estar al día sobre la actualidad del mundo que la rodea o simplemente de aprender sobre estos temas que le interesan.
Pero además, hay que tener en cuenta que si los contenidos son de calidad, éstos conseguirán que los lectores satisfechos se vean motivados a comentarlos y difundirlos por las redes sociales, lo que provocaría una reacción en cadena que terminará aumentando nuestro contador de visitas, el de nuevos interesados e incluso el de clientes en potencia que antes desconocían a la empresa.
Si tenéis un empresa que está sobre la cuerda floja o a punto de subirse sobre ella, intentad mejorar vuestra marca online mejorando vuestra página web y potenciando vuestra participación en las redes sociales, y si queréis que desde PlaneaWeb os ayudemos, sólo tenéis que contactar con nosotros a través del formulario de contacto.